miércoles, 31 de julio de 2019

A tí

Te contaré
entre palabras,
entre miradas,
entre suspiros...
los secretos misteriosos del universo.
... Y me acurrucarás
entre palabras,
entre miradas,
entre suspiros
ese maravilloso y eterno momento

Científicos españoles crean quimeras de humano y mono en China

Científicos españoles crean quimeras de humano y mono en China
El equipo de Juan Carlos Izpisúa inyecta en embriones de los animales células madre de personas con el fin de avanzar en la generación de órganos para trasplantes
   
El investigador Juan Carlos Izpisúa, fotografiado el año pasado en Madrid. JAIME VILLANUEVA
El equipo del investigador Juan Carlos Izpisúa ha logrado crear por primera vez quimeras de humano y mono en un laboratorio de China, un importante paso hacia su objetivo final de convertir a animales de otras especies en fábricas de órganos para trasplantes, según confirma a EL PAÍS su colaboradora Estrella Núñez, bióloga y vicerrectora de investigación de la Universidad Católica de Murcia (UCAM).
Las quimeras, según la mitología griega, eran monstruos con vientre de cabra y cola de dragón, capaces de vomitar fuego por las fauces de su cabeza de león. Las quimeras científicas son menos grotescas. El grupo de Izpisúa, repartido entre el Instituto Salk de EE UU y la UCAM, ha modificado genéticamente los embriones de mono para inactivar genes esenciales para la formación de sus órganos. A continuación, los científicos han inyectado células humanas capaces de generar cualquier tipo de tejido. El fruto es una quimera de mono con células humanas que no ha llegado a nacer, ya que los investigadores han interrumpido la gestación. El experimento se ha realizado en China para sortear las trabas legales.
“Los resultados son muy prometedores”, asegura Núñez. Los autores no ofrecen más detalles porque están pendientes de publicarlos en una revista científica internacional de alto impacto. “Desde la UCAM y el Instituto Salk estamos tratando no ya solo de avanzar y continuar realizando experimentos con células humanas y de roedores y cerdos, sino también con primates no humanos”, explica Izpisúa. “Nuestro país es pionero y líder mundial en estas investigaciones”, celebra.
Un embrión de ratón con células de rata en su corazón. INSTITUTO SALK
Izpisúa, nacido en Hellín (Albacete) en 1960, recuerda que su equipo ya llevó a cabo en 2017 “el primer experimento de quimeras entre humanos y cerdosdel mundo”, aunque con menos éxito. “Las células humanas no agarraron. Vimos que contribuían muy poco [al desarrollo del embrión]: una célula humana por cada 100.000 de cerdo”, explica el veterinario argentino Pablo Ross, investigador de la Universidad de California en Davis y coautor de aquel experimento.
El equipo de Izpisúa sí ha logrado la creación de quimeras entre especies más emparentadas entre sí, como el ratón y la rata, cinco veces más próximas que los humanos y los cerdos. También en 2017, los investigadores utilizaron la revolucionaria técnica de edición genética CRISPR para inactivar genes de embriones de ratón fundamentales para el desarrollo del corazón, los ojos y el páncreas. Entonces, introdujeron células madre de rata, capaces de generar esos órganos. El resultado fue una serie de embriones quimera de rata y ratón, cuya gestación también fue abortada por los investigadores siguiendo el consenso internacional en este tipo de experimentos.
El médico Ángel Raya, director del Centro de Medicina Regenerativa de Barcelona, recuerda las “barreras éticas” a las que se enfrentan estos experimentos con quimeras. “¿Qué pasa si las células madre escapan y forman neuronas humanas en el cerebro del animal? ¿Tendrá conciencia? ¿Y qué pasa si estas células pluripotentes se diferencian en espermatozoides?”, plantea Raya. Estrella Núñez asegura que el equipo de Izpisúa ha “habilitado mecanismos para que si las células humanas migran al cerebro se autodestruyan”.
Izpisúa ya realizó en 2017 el primer experimento de quimeras entre humanos y cerdos del mundo
Para evitar estos obstáculos éticos, según relata Raya, la comunidad científica ha fijado tradicionalmente “una línea roja de 14 días” de gestación, un tiempo insuficiente para que se desarrolle el sistema nervioso central humano. Antes de llegar a esos 14 días, los embriones quiméricos se eliminan. “La gestación no se lleva a término en ningún caso”, confirma Núñez.
Raya es escéptico sobre la posibilidad —en cualquier caso muy lejana— de convertir a los animales en incubadoras de órganos para los humanos, pero considera que estas investigaciones sí serán muy útiles para obtener modelos en los que estudiar el desarrollo embrionario y algunas enfermedades de las personas. “Se abre una vía de investigación, no una fábrica de órganos”, opina.
El primer equipo científico que creó quimeras de rata y ratón, en 2010, fue el del biólogo japonés Hiromitsu Nakauchi, de la Universidad de Stanford (EEUU). En 2017, su equipo generó páncreas de ratón dentro de ratas y demostró que estas células revertían la diabetes cuando eran trasplantadas de nuevo a ratones con la enfermedad. Nakauchi recuerda que los Institutos Nacionales de la Salud de EE UU —principales financiadores de la ciencia biomédica en el mundo— “no apoyan la investigación de quimeras humanoanimales, pero hay otras agencias de financiación, como el Departamento de Defensa y el Instituto de Medicina Regenerativa de California, que sí respaldan estos estudios”.
Los experimentos con quimeras tienen el riesgo de que se formen neuronas humanas en el cerebro de los animales
Los trabajos de Izpisúa con monos en China han sido en buena parte financiados por la Universidad Católica de Murcia. Son estudios muy caros. “Si juntamos las investigaciones de humano/cerdo, humano/ratón y humano/mono, son muchos cientos de miles de euros”, calcula la vicerrectora de investigación de la UCAM.
En España, este tipo de ensayos están muy restringidos y limitados solo a investigaciones de enfermedades mortales. “Estamos haciendo los experimentos con monos en China porque, en principio, aquí no se pueden hacer”, reconoce Núñez, quien quita importancia a que su universidad sea católica. “Lo que queremos es progresar en pro del beneficio de las personas que tienen una enfermedad. Hemos pedido nuestros permisos y está dentro de nuestra ética”, subraya la bióloga.
“Si la naturaleza sabe hacer ciertas cosas, ¿por qué tenemos que hacerlas nosotros en una placa de laboratorio? Es mucho más difícil reproducir un organoide en una placa que inducir que la naturaleza fabrique un órgano donde lo está fabricando siempre”, reflexiona.
Núñez es consciente de las dificultades. Como recalca Ángel Raya, los páncreas de ratón generados dentro de ratas siguen teniendo células de las propias ratas en estructuras como sus vasos sanguíneos, un posible motivo de rechazo en caso de trasplante. “El fin último sería conseguir un órgano humano que pueda ser trasplantado, pero el camino en sí es casi lo más interesante para los científicos que vivimos este momento. En estos experimentos es donde aprendes realmente la biología del desarrollo de lo que estás estudiando. Yo soy prácticamente consciente de que no llegaré a verlo, pero para llegar a ese punto [la fabricación de órganos humanos en animales] necesariamente hay que pasar por este”, razona la vicerrectora de investigación de la UCAM.
“Lo que queremos es progresar en pro del beneficio de las personas que tienen una enfermedad", afirma la bióloga Estrella Núñez
“La ciencia no es algo a lo que le puedas poner puertas. Los caminos de la ciencia te llevan luego hacia ramas en las que nunca hubieras pensado. A pesar de que podamos no llegar a conseguir órganos para trasplantes, si no pasáramos por aquí no habría un avance en la ciencia”, señala.
Otros científicos, como el químico Marc Güell, están explorando otras vías, con un objetivo similar: solucionar la escasez de órganos trasplantables. Casi todos los mamíferos tienen dentro de su ADN virus que pasan de padres a hijos. En el caso de los cerdos, estos virus empotrados en el genoma pueden infectar células humanas. Hace ya cuatro años, cuando estaba en la Universidad de Harvard, Güell ayudó a inactivar esos virus incrustados en el ADN gracias a la herramienta de edición genética CRISPR. “Humanizamos el cerdo mediante ingeniería genética”, explica el químico, que recuerda que el año pasado un equipo de la Universidad de Munich logró que dos monos sobrevivieran más de seis meses con corazones de cerdo trasplantados. “No veo por qué no puede ser posible hacer ingeniería para hacer más compatible el desarrollo de tejidos humanos en cerdos”, argumenta el investigador, ahora en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona.
El propio Izpisúa invitó a abrir la mente en una entrevista con este periódico en 2017: “La historia nos demuestra una y otra vez que, con el tiempo, nuestros baremos éticos y morales cambian y mutan, como nuestro ADN, y lo que ayer era éticamente inaceptable, si ello supone realmente un avance para el progreso de la humanidad, hoy ya forma parte esencial de nuestras vidas”.
“CON EL TIEMPO NECESITAREMOS LLEVAR LAS GESTACIONES A TÉRMINO”
El biólogo japonés Hiromitsu Nakauchi, pionero en 2010 de la generación de quimeras entre ratón y rata, cree que en algún momento habrá que saltarse las líneas rojas que han existido hasta ahora, como la interrupción de las gestaciones. “Hasta el momento, las células humanas no han sobrevivido en embriones animales. Sin embargo, el propósito de nuestra investigación es lograr que las células humanas sobrevivan y contribuyan a la formación de quimeras. Por lo tanto, con el tiempo necesitaremos llevar las gestaciones a término”, apunta Nakauchi, que tiene un pie en Stanford y otro en la Universidad de Tokio.
Este marzo, Japón cambió la ley que prohibía este tipo de experimentos más allá del día 14 de gestación y que también vetaba la transferencia de los embriones al útero de una hembra animal, según la revista científica Nature. El cambio de criterio del Gobierno japonés supone dar luz verde al nacimiento de animales con células humanas.

lunes, 29 de julio de 2019

Entre líneas


Dando forma a las esperas.
Entre líneas
Ayuntamiento de Berriozar. Navarra

                                           © M. J. Castillejo



Los designios de la vida


Volver la vista atrás de vez en cuando nos ayuda a poder ver con más claridad nuestro presente y encaminar el futuro inventado.
Para mi se ha convertido en un juego mental, adelante, atrás, cierto, incierto, un desorden de momentos que algunas veces me causa confusión y temo que mi mente invente situaciones, personas, sufrimientos y alegrías.
Mi primera crisis existencial, esa que dicen que la pasan las personas a los cuarenta, la tuve a los seis años, a esa edad, el pequeño mundo que me rodeaba me decepcionó como nunca hubiera podido imaginar. Comencé a poner nombre a las mentiras de los adultos más cercanos en los que había confiado toda mi vida, mis juegos, mis incertidumbres, mis esperanzas. Observaba el cielo y las estrellas que un día fueron razón de sueños y ensueños y sus mensajes se tornaban confusos, no estaban cercanos como los imaginaba a la hora de ir a dormir, no albergaban reyes ni princesas, no pertenecían a ningún cuento que me leía mi mamá cuando se ponía el sol y llegaba la pausa del descanso, con el cual podía huir al país de más allá. Descubrí el dolor ajeno, las injusticias sociales, la muerte y todos aquellos sufrimientos a los que los adultos parecían querer aferrarse para poder salir adelante. Ese día lo tengo fuertemente marcado en mi memoria, ese día dejé de ser niña, ese día comprendí que nadie podía reconfortar mis inquietudes porque nadie entendía mis preguntas, nadie nada más que yo misma, estaba dispuesto a caminar a mi lado para recorrer ese gran viaje que de repente se había presentado en mi vida.
A partir de ese momento conocí el sentido de la soledad y la falta de entendimiento, tanto los adultos como los niños comenzaron a ignorarme, desaparecieron los días de juego compartido y comencé a pedir que me regalaran libros, necesitaba leer, saber, saber, saber, encontrar respuestas a esas preguntas a las que con el pasar de los años fui dando forma abriéndome camino en los misteriosos designios de la vida.

domingo, 28 de julio de 2019

¿Te atreves?


La pasión es el motor que mueve la vida, cuanto te privan de poder hacer lo que más amas, te destierran a un inframundo sin direcciones ciertas, el corazón deja de latir y todas las miradas se vuelven opacas.
La oscuridad es una tormenta, pero la libertad y la fuerza interior te mantiene entera, hasta que nuevamente te das cuenta que la vida se construye de momentos, momentos compartidos con quien se atreve a dejarse caer en tu abismo. 
El resto
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Una ilusión infundada

¿Te atreves?



sábado, 27 de julio de 2019

AMOR Y LIBERTAD

Esta expresión china se utiliza cuando uno echa de menos a alguien.
Se dice entonces " un día dura tres otoños".
No hagas que un día dure tres otoños para mi. Regalame lo que te pido de forma incondicional, inocente y sincera en cada mirada. No apartes tu mirada ante la adversidad de mis palabras, acurruca su significado y acomodalas a tu esencia. Esa es una manera grandiosa de amar, de dejarse en el abismo de "otro" y caminar en nuestro propio significado de ser ese "algo" que nadie nos ha impuesto.
AMOR Y LIBERTAD


Instantanea


Instantanea
Bookcroising





Cuando lo más pequeño se torna inmenso ante tu mirada, descubres que  tu insignificancia ayuda al universo a organizar su caos en un orden descontrolado dándole un sentido "casi" real



viernes, 26 de julio de 2019

Sentirte

SENTIRTE 

Quiero sentirte tan tan profunda 
que me duela cuando hagamos el amor 
tan onda 
que sea capaz de poder fundirme lento y firme en tus entrañas 
acariciar tus profundidades y por segundos fingir llantos para que no sepas del terrible dolor que le produce a mi piel cuando se destierra de tus roces. 
Quiero sentirte tan tan profunda 
que me ahogue y muera con un solo beso 
labio contra labio hilando pedazos de nuestras entrañas, de los instintos más primitivos 
alejándonos y acercándonos en los momentos más crudos de nuestra vil existencia. 
Quiero sentirte tan tan profunda 
que me hagas desaparecer un instante de este mundo efímero 
para poder darte un sentido 
para poder hacerte realidad en mi largo y arduo caminar. 

lunes, 22 de julio de 2019

Sonidos superpuestos de la vida diaria


Sonidos superpuestos de la vida diaria

Ruidos entrecortados de motores, el tic tac de un semáforo de otro y otro más se mezclan con el aire que levanta el movimiento de mi bicicleta por el arrugado asfalto. Las ruedas no se detienen ni un segundo y un zumbido parecido al de una mosca que revolotea inquieta en un oído ajeno, sale disparado de entre los radios de las dos ruedas que sustentan el aparato. El chirrido de un frenazo desvía mi atención, sonidos inesperados que se intercalan con el silencio causado por el vaivén de las hojas de los árboles que me acompañan cada día en mi camino al hospital, a ambos lados de la acera.
Los rayos de sol de las primeras horas llaman a todos los seres vivos a disfrutar de un nuevo día.
Toscamente el paisaje cambia y con él los sonidos que lo acompañan.
A mi derecha las aguas del río entonan varias notas musicales y los gorriones, los patos y las picarazas, que descansan en sus orillas, le acompañan creando una gran orquesta natural, pareciendo querer jugar a su vez, con la tímida luz que se deja escapar entre las copas de los árboles.
De fondo el gruñir del ascensor urbano, algunos caminantes que se acercan al cantar de la ciudad desenfrenada, de una ciudad que nos recibe con las campanadas de las siete jugando con paredes medievales que protegen al gran urbe.
YO desdibujando la percepción del tiempo.
El hecho de haber elegido esta caminata urbana me ha llevado a reflexionar sobre el espacio que continuamente ocupamos y como interactuamos de manera dinámica y fluida con nuestro entorno influenciándonos continuamente, tanto en la creación de sonidos como en la escucha de estos. Sonidos producidos por mi propio movimiento y los creados por la naturaleza, llegando algunas veces a imaginármelos. En este caso he intentado describir los sonidos a través de la escucha pero no he podido dejar de describir el entorno cambiante que me rodea diariamente.
Por otra parte, pensando en la definición de espacio como un espacio en término antropológico-social, un itinerario creado por el hombre, es mi caso la carretera donde voy con la bicicleta por la que circulan coches, hay semáforos y árboles decorativos que me lleva a un espacio completamente natural, sin prácticamente manipulación, sin transito… Estos caminos parecen querer cruzase o entrecruzarse con un espacio político-histórico que se encuentra al final del trayecto, cuando aparece la gran urbe

viernes, 12 de julio de 2019

NUNCA VI UN SONIDO R. Murray Schafer

NUNCA VI UN SONIDO

 R. Murray Schafer 

Ahora quisiera hablar de los sonidos. 
El mundo está lleno de sonidos.
No puedo hablar de todos ellos.
Hablaré de sonidos que importan.
Para hablar de sonidos, produzco sonidos. 
Creo - un acto original que realicé en el mismo momento en que emergí en esta tierra. 
La creación es ciega. 
La creación es sonora.
 "En el comienzo, Dios creó el cielo y la tierra" - con su boca. 
Dios nombró el universo, pensando en voz alta.
 Los dioses egipcios existieron a partir de que Atum, el creador, los nombró. Mithra existió a partir de las vocales y las consonantes. 
Los dioses terribles existieron a partir del trueno. 
Los dioses fructíferos existieron a partir del agua.
Los dioses mágicos existieron a partir de la risa.
Los dioses místicos existieron a partir de ecos distantes.
Toda creación es original. Todo sonido es nuevo. 

Micropensamiento. Las mentiras y yo

No sé mentir, elaboró una pequeña mentira durante días y cuando llega el día de decirla, me la imagino en mi mente y las palabras que salen ...